Guanajuato enfrenta interrupciones en su infraestructura vial debido a las protestas de agricultores de maíz y sorgo, quienes han bloqueado 15 puntos carreteros en exigencia de un precio más elevado por tonelada, tras no llegar a un consenso con el Gobierno Federal. El conflicto estalló el lunes pasado, cuando cerraron la carretera León-Silao, causando congestiones y dejando a muchos varados.
Los manifestantes comenzaron sus acciones el lunes tras no lograr un acuerdo que satisfaga sus demandas de un precio de 7 mil 200 pesos por tonelada de maíz blanco. Actualmente, el Gobierno Federal ofrece 6 mil 050 pesos, una cifra que los agricultores no consideran aceptable. Según el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué Sacristán, la oferta incluye incentivos adicionales, en tanto los gobiernos de Jalisco, Guanajuato y Michoacán proporcionarán esquemas de apoyo complementario.
Durante la movilización, carreteras en municipios como Salamanca, Irapuato, y Acámbaro sufrieron cierres, impactando la movilidad en la región. Aunque se logró la apertura parcial de algunos accesos, la amenaza de reanudar los bloqueos persiste. Jaime Rangel, productor del Comité para el Mejoramiento del Agro Guanajuatense, declaró que la medida de desbloqueo fue temporal y está sujeta a nuevas instrucciones.
Mientras tanto, el diálogo continúa en busca de un acuerdo que permita a los productores alcanzar la rentabilidad deseada. La Secretaría de Agricultura sigue comprometida con buscar apoyos complementarios y dar seguimiento a la negociación. La situación sigue siendo tensa y los agricultores del Bajío mantienen su exigencia, advirtiendo sobre la posibilidad de futuros cierres si no se cumplen sus demandas.