El presidente Donald Trump ha firmado un decreto que busca añadir el nombre Departamento de Guerra al actual Departamento de Defensa, cumpliendo con una promesa anunciada previamente. La Casa Blanca explicó, a través de un documento enviado a AFP, que esta medida tiene el objetivo de restaurar el nombre histórico y que Trump ha instado al secretario Pete Hegseth a realizar las acciones necesarias para que este cambio sea permanente.
El proceso para que este nombre adicional se convierta en oficial requerirá la modificación de la ley actual, según mencionado por la administración de Trump. El presidente había anticipado esta iniciativa a finales de agosto, justificándola con el argumento de que el nombre actual proyecta una imagen demasiado defensiva del país.
Trump ha argumentado que el nuevo nombre reflejará de mejor manera el poder y la capacidad del departamento para resguardar los intereses nacionales. El ejército estadounidense, reconocido como el más grande a nivel mundial, está implicado en este cambio designativo que apela a una estrategia de paz mediante la fuerza, asegurando que la reputación de Estados Unidos se vea reforzada en la esfera global.
Este nuevo enfoque ha sido parte de la retórica habitual de Trump, quien ha buscado resaltar la fuerza y el respeto internacional de Estados Unidos. El nombre de Departamento de Guerra fue el nombre original utilizado para la agencia desde 1789 hasta 1949, antes de que fuera renombrado como Departamento de Defensa, y este intento de cambio busca recuperar esa denominación histórica, de acuerdo con la administración actual.
La Casa Blanca ha indicado que procederán con los pasos necesarios para implementar esta modificación, aunque aún será necesario que el Congreso apruebe cualquier cambio legal formal. Así, el presidente Trump continúa impulsando su agenda basada en la representación de un país fuerte y respetado internacionalmente.