Han pasado más de tres años y medio desde el inicio del conflicto en Ucrania. Recientemente, el expresidente estadounidense Donald Trump afirmó su disposición a imponer sanciones económicas a Rusia, presionando a Vladímir Putin para negociar un alto el fuego. Trump señaló en una reunión con su gabinete que preferiría evitar una guerra económica, la cual, aseguró, sería perjudicial para Rusia.
En el frente, la Fuerza Aérea ucraniana reportó la interceptación de 74 de 95 drones rusos. No obstante, se produjeron 21 impactos en nueve ubicaciones diferentes, afectando zonas como Jersón y Zaporiyia, donde se registraron víctimas civiles y heridos.
Por otro lado, el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, ha criticado duramente a Trump, calificándolo de activo soviético y acusándolo de favorecer a Rusia en las negociaciones de paz. Rebelo de Sousa afirmó durante un evento del PSD que las amenazas de sanciones por parte de Estados Unidos no han sido concretadas en acción.
Mientras tanto, Ucrania sigue buscando opciones para poner fin al conflicto, con reuniones programadas entre representantes ucranianos y la administración Trump, así como conversaciones en Riad con funcionarios de Arabia Saudí para discutir vías hacia la paz.
En Europa, líderes como Emmanuel Macron y Friedrich Merz han expresado su apoyo a Moldavia en su intención de unirse a la Unión Europea. Esta postura es vista como una respuesta a la amenaza percibida de Rusia en la región.
Italia, bajo el liderazgo de Giorgia Meloni, ha reclamado un papel importante en el desarrollo de garantías de seguridad para Ucrania, una propuesta que resalta las sólidas relaciones de defensa similares a las de la OTAN. Además, la región rusa de Bélgorod sufrió un ataque con un dron ucraniano que resultó en la muerte de un civil y dejó a otro herido.
Ucrania, por su parte, está explorando cómo compartir sus datos del campo de batalla con sus aliados, un recurso que considera valioso para fortalecer sus lazos internacionales. Estos movimientos en el tablero internacional reflejan un complejo entramado de diplomacia y conflicto, que continúa evolucionando.
