Luana Alonso, nadadora paraguaya y figura destacada en los Juegos Olímpicos de París 2024, se convirtió en tema de conversación debido a sus provocadoras publicaciones en redes sociales y su desafortunado desenlace deportivo. Aunque fue expulsada de la villa olímpica por lo que se describió como conducta inapropiada, captando la atención de la prensa y el público, su participación en los 100 metros mariposa no cumplió con las expectativas, quedando fuera de las semifinales.
Nacida el 19 de marzo de 2004 en Asunción, Alonso comenzó a competir a los seis años y desde entonces demostró un notable talento en la piscina, destacando en campeonatos sudamericanos y mundiales. Sin embargo, fue su paso por París 2024 el que se vio eclipsado por la controversia. Además de su eliminación temprana, las noticias giraron en torno a su comportamiento considerado inapropiado, que supuestamente incluía viajes no autorizados y el uso de ropa distinta al uniforme oficial, lo cual generó disconformidad en la delegación paraguaya.
Tras retirarse del deporte competitivo, Alonso abrió una cuenta en OnlyFans y se centró en sus estudios de Ciencias Políticas en la Universidad Southern Methodist en Dallas. No obstante, un reciente comentario en su Instagram ha avivado los rumores de su regreso. Al ser consultada por un seguidor acerca de su posible retorno a la competición, insinuó que podría volver el año que viene, aunque no especificó si sería en natación.
El interés de Alonso por representar a otro país ha sido tema de debate, luego de que expresara su deseo de competir por Estados Unidos en lugar de Paraguay en una transmisión previa a los Juegos. A ello, se sumaron las declaraciones del presidente del Comité Olímpico Paraguayo, quien señaló que su salida del equipo se debió a un viaje no autorizado a Disneyland París. Por su parte, Alonso ha desmentido algunas de estas afirmaciones, aunque ha sido parca en detalles adicionales. Su potencial regreso al ámbito deportivo está en el aire, dejando a muchos expectantes sobre su próxima decisión.