Un misil impactó en un edificio en la Franja de Gaza que albergaba una oficina de Médicos del Mundo, dejando al menos ocho muertos, entre ellos cuatro niños, un adolescente y tres adultos. El proyectil alcanzó directamente la última planta del edificio ubicado en Deir El Balah, identificado ante las autoridades militares israelíes y registrado oficialmente como protegido contra ataques militares según los acuerdos de coordinación humanitaria.
El ataque se produjo en el contexto de la celebración de Eid, motivo por el cual el personal de Médicos del Mundo no se encontraba en el lugar y se reporta a salvo. La zona afectada, hasta ahora relativamente fuera de bombardeos, alberga oficinas de diversas ONG y poblaciones desplazadas del norte de la Franja y de la zona de Khan Yunis, lo que enfatiza la importancia del trabajo humanitario en la región.
Médicos del Mundo había notificado con anterioridad al ejército israelí sobre la presencia bien identificada de su oficina en el edificio considerado seguro. A pesar de ello, aseguran que no recibieron ninguna advertencia previa que permitiera evacuar o proteger a los ocupantes. Hasta el momento, la Oficina de Coordinación y Liaison (CLA), responsable de coordinar los movimientos humanitarios en Gaza, no ha emitido explicación alguna tras ser contactada por la organización.
Este incidente se suma a ocasiones anteriores de ataques sin aviso, subrayando la vulnerabilidad de los espacios humanitarios en contextos de conflicto. La grave violación del Derecho Internacional Humanitario reflejada en este ataque resalta la obligación de proteger tanto a la población civil como a las entidades que operan en ambientes de crisis y guerra.
