El Día Internacional del Trabajo se conmemoró con marchas en distintas ciudades del mundo, donde trabajadores de diversas nacionalidades alzaron sus voces para manifestar sus demandas. En Francia, Italia y Taiwán, las manifestaciones fueron notables por incluir en sus consignas un mensaje en contra de la política arancelaria del entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
En París, miles de personas se congregaron en las calles, mostrando banderas y pancartas que expresaban su descontento ante las medidas económicas adoptadas por Trump. Los sindicatos franceses resaltaron la importancia de un cambio en las políticas comerciales globales, al considerar que estas afectan directamente a los trabajadores de distintos sectores.
En Roma, la capital italiana, los sindicatos se unieron para organizar una marcha que recorrió varios puntos de la ciudad. Los manifestantes expresaron su preocupación por el impacto de las tarifas impuestas por el gobierno estadounidense en la industria italiana. Esta movilización se sumó a las voces que exigen un trato más justo y equitativo en las relaciones comerciales internacionales.
Taiwán también fue escenario de multitudinarias protestas, donde los participantes dejaron claro su rechazo a la agresividad arancelaria del gobierno de Estados Unidos. Las manifestaciones en Taiwán destacaron por la diversidad de sectores representados, desde la manufactura hasta la tecnología, todos demandando un entorno económico más estable y predecible para el libre comercio.
Estas protestas en varias partes del mundo reflejan un sentimiento compartido por parte de colectivos laborales que abogan por una economía más justa y sostenible. En cada lugar, las consignas se adaptaron a las demandas específicas de cada región, pero conservaron un eje común: la necesidad de políticas que protejan a los trabajadores y promuevan un comercio justo.
Las marchas por el Día Internacional del Trabajo se consolidaron como una plataforma para que las comunidades laborales expresen su voz, dejando claro que, al margen de las fronteras, las luchas por mejores condiciones laborales y justicia económica son una causa compartida a nivel mundial.
