
Arqueólogos han descubierto un altar con una antigüedad estimada de 1,700 años en una ciudad maya. Este descubrimiento se destaca por sus coloridas decoraciones y el inquietante hallazgo de restos humanos. Los expertos consideran que este altar podría ser fundamental para comprender la geopolítica maya durante ese periodo histórico.
El hallazgo sugiere una posible influencia de la cultura teotihuacana en la región maya. Los arqueólogos están analizando los elementos decorativos y los restos humanos para determinar las prácticas culturales y las conexiones entre distintas civilizaciones de la época. Se espera que estos análisis arrojen luz sobre las relaciones y dinámicas de poder entre las diferentes culturas mesoamericanas.
El altar presenta signos evidentes de la influencia teotihuacana en su diseño y en los elementos encontrados, lo que podría indicar la presencia o interacción significativa entre ambas civilizaciones. Se están llevando a cabo investigaciones detalladas para descifrar el simbolismo y las funciones del altar, además de establecer conexiones con otros hallazgos arqueológicos en la región.
Este descubrimiento se suma a otros hallazgos que han proporcionado información sobre la interacción entre los mayas y otras culturas antiguas, contribuyendo a una comprensión más amplia y detallada de la historia prehispánica de la región. La investigación continúa, buscando esclarecer el impacto de las influencias externas en el desarrollo de la civilización maya.