Cumbre Árabe-Islámica en Doha: Respuesta al Conflicto en Gaza
En una cumbre de emergencia celebrada en Doha, más de 50 países se unieron para analizar la situación tras el reciente bombardeo israelí que tuvo como blanco un equipo negociador de Hamas. El ataque, calificado por Qatar como flagrante, traicionero y cobarde, dejó seis muertos, incluyendo un oficial catarí. Este incidente generó tensiones diplomáticas y temor por una posible escalada del conflicto que afecta a la región desde hace casi dos años.
Durante la reunión, el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, acusó a Israel de sabotear intencionalmente las negociaciones de paz con sus recientes ataques. Mencionó que esto refleja una estrategia para expandir la influencia israelí en la región árabe. Anteriormente, Al Thani ya había señalado a Israel por acciones similares, como el bombardeo que resultó en la muerte del líder político palestino, Ismail Haniyeh.
En el encuentro participaron líderes de países afectados por los ataques israelíes, incluyendo Irán, Siria, Líbano y Yemen. El presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi, y el primer ministro iraquí, Mohamed Sia al Sudani, enfatizaron la necesidad de una respuesta conjunta. Al Sudani propuso la creación de una fuerza de seguridad transnacional, similar a la OTAN, para proteger a los países árabes.
Pese a no anunciarse medidas concretas, Qatar instó a la comunidad internacional a pedir cuentas a Israel, sugiriendo que su participación en futuras conversaciones de alto el fuego y su relación con Israel está en revisión, según declaró el primer ministro catarí, Mohamed Al Thani.
Estados Unidos, tras haber alertado a Doha sobre el ataque, intenta mediar y evitar un distanciamiento con Qatar, enviando al secretario de Estado, Marcos Rubio, para reunirse con Al Thani. Mientras tanto, Doha revalúa su rol mediador en el conflicto, en un contexto donde las sociedades árabes, respaldando a Palestina, ven a sus gobiernos atrapados entre sus lazos con Israel y Estados Unidos y los sentimientos de sus pueblos.
