El Museo del Louvre ha decidido cerrar una galería debido a problemas estructurales, suscitados después del robo del 19 de octubre de valiosas joyas de la Corona francesa. Estas preocupaciones han llevado a la ministra de Cultura de Francia, Rachida Dati, a argumentar que las mejoras en el conocido museo deben hacerse por etapas para evitar un cierre total, según explicó en una entrevista con BFMTV. Dati enfatizó la importancia de no interrumpir la experiencia de los visitantes ni afectar al personal del museo.
El cierre temporal de la galería Campana y otras oficinas responde a precauciones para asegurar la seguridad de los visitantes y el personal. Un análisis técnico establecerá las medidas urgentes a tomar antes de reanudar las operaciones normales. Actualmente, la clausura se centra en el cuadrilátero Sully, específicamente en el ala sur, donde las vigas del segundo piso muestran fragilidad. François Chatillon, arquitecto a cargo de los monumentos históricos de Francia, incluida la estructura del Louvre, corroboró la naturaleza preventiva de esta medida. Aclaró que no existe un riesgo inmediato de colapso, aunque se reconoció la necesidad de renovaciones en áreas no restauradas desde la década de 1980.
Desde el robo en octubre, que involucró el hurto de ocho joyas aún no recuperadas, el Louvre ha estado bajo escrutinio por sus fallas en seguridad y estructura. A pesar de algunos arrestos relacionados con el delito, el museo sigue tomando medidas para enfrentar estos desafíos. La administración busca equilibrar las necesidades de mantenimiento con la demanda de visitantes, sin comprometer la accesibilidad del público al famoso monumento cultural.