
Ciudad de México. La esperada final de ida de la Liga MX entre América y Toluca culminó en un empate sin goles en el estadio Ciudad de los Deportes. Pese a las expectativas de ambos equipos, el encuentro no logró definir un claro favorito para el partido de vuelta.
El América, tricampeón del torneo, mostró intentos de control en el campo, aunque no logró imponer su juego frente a unos Diablos que, aun sin su goleador Paulinho y el portero Pau López, se mantuvieron fieles a su estrategia defensiva y apostaron por el contragolpe bajo la dirección del técnico Antonio Mohamed. Sin embargo, los toluqueños no pudieron aprovechar la situación para superar la defensa americanista.
El encuentro entre las Águilas y los escarlatas estuvo marcado por dos controversiales decisiones arbitrales, donde el silbante Daniel Quintero optó por no revisar el VAR pese a las vehementes protestas por un posible penal sobre Henry Martín. Por su parte, el Toluca, líder de la fase regular, reafirmó su orden táctico y evitó conceder oportunidades a sus oponentes.
La afición de ambos equipos estuvo presente en todo momento. Desde el sector general, los seguidores del América exigieron una mejor actuación, mientras que el grupo de animación, Ritual del Kaoz, expresó su descontento por restricciones impuestas por la directiva americanista en cuanto al colorido local.
Este partido se llevó a cabo con un fuerte dispositivo de seguridad compuesto por más de 1500 elementos, y fue seguido de cerca por los revendedores, quienes ofrecieron boletos en la zona más económica por sumas considerables.
Entre las alegorías presentes en el estadio, destacó una bandera gigante en honor a Leo Beenhakker, antiguo técnico del América fallecido recientemente, siendo una muestra del peso histórico que acompaña a este equipo en cada competición.
Con el primer capítulo concluido, la expectativa ahora se centra en el estadio Nemesio Díez, escenario crucial donde se definirá al campeón.