El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado un nuevo decreto que prohíbe la participación de mujeres transgénero en competencias deportivas femeninas, intensificando el debate en torno a los derechos transgénero en el ámbito deportivo. Este decreto forma parte de un esfuerzo más amplio por coordinar la preparación del Gobierno para los Juegos Olímpicos de Verano de 2028 en Los Ángeles, a través de un grupo de trabajo establecido en la Casa Blanca.
Durante el anuncio, Trump enfatizó su posición sobre el tema al destacar el compromiso de Gene Sykes, presidente del Comité Olímpico y Paralímpico de EE. UU., de adherirse a esta política. El documento oficial de 27 páginas, lanzado el mes pasado, detalla la postura de la administración de mantener a los hombres fuera de los deportes femeninos, medida que ha suscitado críticas y divisiones en la opinión pública.
Trump, durante su intervención, evitó abordar directamente la posibilidad de enjuiciar a atletas transgénero que compitan en categorías femeninas, mentioning en cambio la necesidad de pruebas muy rigurosas. Estas pruebas estarán a cargo de organismos deportivos internacionales, como World Athletics, que ya están planificando implementar verificaciones genéticas. La Federación Mundial de Boxeo también anunció pruebas similares, un tema que ha causado controversia tras mencionar a la boxeadora argelina Imane Khelif, que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París 2024 luego de un escrutinio sobre su género. Khelif ha reafirmado su identidad como mujer y ha sido apoyada por las autoridades olímpicas.
Trump afirmó que las medidas del Comité Olímpico y Paralímpico probablemente habrían sido adoptadas incluso sin su intervención, sugiriendo que se trata de un tema importante para muchas personas. Además, criticó la gestión de los políticos demócratas de California en torno a los Juegos Olímpicos, destacando a la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, y al gobernador Gavin Newsom por su manejo de problemas estatales.
El grupo de trabajo olímpico es liderado por Trump y el vicepresidente J.D. Vance, y el presidente aseguró que está dispuesto a desplegar a la Guardia Nacional y al Ejército si es necesario para garantizar la seguridad del evento global.
