Este sábado, el gobierno de Estados Unidos se unió a la ofensiva militar de Israel para detener el programa nuclear de Irán, lo que resultó en el bombardeo de las instalaciones nucleares iraníes de Fordo, Natanz e Isfahán. La acción ha provocado una serie de reacciones internacionales, dividiendo opiniones desde Europa hasta América Latina.
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, condenó el ataque y advirtió que podría tener consecuencias catastróficas si el conflicto se intensifica, llamando a los Estados miembros a desescalar las tensiones y cumplir con sus obligaciones internacionales. Por otro lado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó la operación como un éxito espectacular, afirmando que las instalaciones nucleares fueron destruidas completamente.
En Europa, líderes como el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, respaldaron la acción, describiéndola como una medida para aliviar la amenaza de un Irán nuclear. Starmer instó a Irán a regresar a la mesa de negociaciones para buscar una solución diplomática a la crisis.
América Latina se ha posicionado principalmente en contra de la intervención militar estadounidense. Los presidentes de Chile, Bolivia, Venezuela y Cuba han expresado su rechazo, argumentando que las acciones violan la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional. En declaraciones separadas, el presidente chileno, Gabriel Boric, hizo un llamado al respeto por el derecho internacional humanitario y cuestionó que el poder de EE.UU. justifique violar las normas internacionales.
Mientras tanto, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, calificó los ataques como una grave violación y afirmó que Irán se reserva todas las opciones para defender su soberanía e intereses. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, felicitó a Trump, reiterando su máxima: La paz a través de la fuerza.
La comunidad internacional sigue observando de cerca la evolución de este conflicto, preocupada por las posibles repercusiones en la estabilidad global.
